Soy indecisa por naturaleza, lo confieso. Y para decidir sobre cualquier tema y dependiendo de la envergadura puedo pasarme horas, días o incluso meses.
Desde lo más mínimo como elegir qué ponerme hasta las decisiones importantes de la vida.
Os diré que llevo meses intentando decidir si darme un baño de color para tapar las incipientes canitas, que son pocas, pero muy brillantes y en un sitio totalmente estratégico y lucido de la cabeza. Aún no me he decidido.
Y también llevo muchos meses rumiando la idea de darle un giro al blog. No un giro radical, que tampoco es cuestión, pero si una pinceladita.
Así que este fin de semana, que por fin he tenido un poquito más de tiempo libre me lié la manta a la cabeza y me puse a cambiar cosas que no me gustaban, a replantearme los temas, a abrir los ojos y en definitiva a poner el rinconcito más a mi gusto.
No quiero decir con esto que aquí no se vaya a cocinar. Claro que sí, es más, este blog nació intentando canalizar una pasión que llevaba sintiendo desde hace mucho y entre fogones y harina vamos a seguir.
Pero quiero hablar de otros temas, de lo que me apetezca, todo relacionado con la cocina, los blogs, la fotografía, recomendaciones de todo tipo, lugares, inspiraciones, todo eso que a mi me gusta y que me parecería una desfachatez no compartir. Porque en realidad si la felicidad no la compartes... ¿Cómo crecemos?
Así que como de un "Pesadilla en la Cocina" de Chicote se tratara, cambiamos la decoración, los colores y abrimos la mente, aunque ya os anticipo que a mi lo que me gusta es la cocina tradicional, la que sabe a casa y eso posiblemente no cambie.
Y hablando del cambio de decoración (les contaré cómo he conseguido todos estos cambios!!), que ya me contarán qué les parece...
Tenemos en la esquinita inferior derecha una flecha que nos ayudará, cuando estemos al final del blog, a subir hasta el principio de la página. Y algo que me tiene enamorada es que a partir de ahora, cada post tendrá la opción de:
¿No es una maravilla? Se acabó ir volando de la habitación a la cocina varias veces mientras se te quema lo que tienes en el Wok o apuntar a mano y llevar el papel para que cuando quieras repetirla se te haya extraviado.
Así que con el blog más organizado. Y esperando que os guste tanto como a mi, cogemos un trébol de 4 hojitas, por aquello de que nos de suerte y a disfrutar de la cocina.
Y como me encantaría conocer a quien está ahí detrás os invito a dejar un granito de arena en los comentarios, que las estadísticas del blog me chivatean cuántas personitas pasan por aquí cada día y sois un porrón y medio.
Así que salgan de las tinieblas, que aquí fuera se está muy a gusto.